La actriz Emma Stone interpreta a Estella, una joven inteligente, creativa y muy determinada que vive de estafas y otras fechorías en las calles londinenses, pero está decidida a hacerse famosa por sus diseños. Cuando la baronesa Von Hellman (Emma Thompson), una leyenda de la moda, advierte el talento de la joven diseñadora, comienza un camino de transformación para Estella que la llevará a inclinarse por su costado malvado y convertirse en la elegantísima Cruella, una mujer desmedida y ávida de venganza.
Transcurre antes de los acontecimientos de las películas 101 DÁLMATAS (tanto del clásico animado de 1961 como de la versión de acción real de 1996), la diseñadora de vestuario Jenny Beavan tuvo libertad creativa a la hora de imaginar los looks para los personajes.
NACIDA PARA SER CRUELLA: Desde el primer día, el nombre de Cruella tuvo el rostro de la actriz Emma Stone. “No puedo imaginarme otra actriz que pudiese definir el viaje de Estella a Cruella tan específica y vívidamente como Emma Stone, porque le da tanto humor, tanta agudeza, tanta exquisitez al personaje, y al mismo tiempo lo hace tan real…”, comenta el productor Marc Platt.
UN MOMENTO, UN LUGAR: El momento histórico y el lugar en el que transcurre Cruella acompañan a la perfección el proceso emocional que atraviesa la protagonista. La mayor parte de la acción transcurre en la Londres de los años setenta, una época disruptiva en los mundos de la música y la moda, atravesada por movimientos emergentes como el punk. Ese contexto sociocultural es el marco ideal de la metamorfosis de Cruella: de una pendenciera huérfana dickensiana a una antiheroína rebelde, ingeniosa, audaz y muy hábil. En el camino, se va conociendo a sí misma y aprende a ser sincera consigo misma.
MUCHO ROCK N’ ROLL: La banda de sonido de Cruella es una explosión del rock emergente de la década del ’70, sonidos pop más tradicionales y música actual. Recientemente, se dio a conocer “Call me Cruella”, la canción original de la película interpretada por Florence + The Machine que encabeza la banda sonora. La música destava con temas como: “One Way or Another” de Blondie, “Should I Stay or Should I Go” de The Clash, “Stone Cold Crazy” de Queen, “Whisper, Whisper” de Bee Gees, “Five to One” de The Doors y “Whole Lotta Love” de Ike & Tina Turner.
POR SIEMPRE PUNK: La estética está fuertemente atravesada por el espíritu del punk. Más allá de la presencia de bandas como The Clash o Blondie en la banda de sonido, el vestuario de Estella también tiene una fuerte impronta de este movimiento contracultural de fines de los ‘70, con guiños a diseñadores icónicos como Vivienne Westwood, y exponentes artísticos como la cantante alemana del punk y new wave Nina Hagen. El peinado y maquillaje del personaje, en tanto, también están fuertemente influenciados por el punk. Nadia Stacey, diseñadora de maquillaje y peinado de Cruella, cuenta que la legendaria cantante Debbie Harry, líder de la banda Blondie, fue su inspiración para Estella.
LOCACIONES SOÑADAS: La película filmó en los estudios de cine Shepperton, en las afueras de Londres, y en 44 locaciones increíbles de la capital británica a lo largo de 40 días. Como la historia transcurre en los años setenta, muchas de esas locaciones fueron adaptadas al estilo y la estética de aquel momento. A su vez, las tomas aéreas de la ciudad de Londres, que cambió tanto en los últimos 50 años, fueron retocadas digitalmente. Algunas de las locaciones que se ven en la película son las tiendas típicas de Portobello Road; la imponente Engelfield House y su finca circundante para los exteriores de la casa de campo de la baronesa; la estación de la fuerza aérea real RAF Halton para los exteriores de la casa de la baronesa en Londres, Ipswitch Manor; la elegante zona de Westminster, en el centro de Londres, junto a la calle The Mall, para los alrededores de la casa de la baronesa; un viejo cuartel general de cemento en Aldermaston para las oficinas del periódico Tattletale; y el Colegio Naval de Greenwich para las secuencias de alfombra roja, parques y varias escenas de autos por las calles.
PERROS PROTEGIDOS Y RESPETADOS: ¿Qué sería de Cruella sin los dálmatas? Como era de esperar, la presencia canina en la nueva película es parte importante de la historia. Siguiendo esa premisa, el equipo creativo reunió un pequeño reparto de animales actores, integrado mayormente por perros rescatados y otros provenientes de los hogares de los entrenadores de la película, que se aseguraron de que los perros fuesen bien atendidos y entrenados antes de la filmación. Además, todas las escenas que incluyeron animales fueron atentamente monitoreadas por la organización estadounidense de protección de animales The Humane Society.
UNA ESCENA ICÓNICA: La escena de la versión animada de 101 DÁLMATAS en la que Cruella conduce alocadamente un Panther De Ville para atrapar a sus perritos que escapan en una camioneta es una de las más recordadas del cine. En Cruella el equipo supo que quería incluir una secuencia que hiciera referencia a aquella escena icónica. Para eso, se crearon dos modelos de Panther De Ville para la película. Uno de ellos, en color bronce, es robado por Cruella cuando necesita escapar velozmente de una fiesta, lo que conduce a una versión de acción real de la emblemática escena del clásico animado de 1961.
UN ESTRENO FABULOSO: El estreno mundial en el teatro El Capitán de Los Ángeles, con la presencia de las estrellas de la película, marcó el regreso de Disney a la emblemática alfombra roja. Con un look digno del glamour de Cruella, Emma Stone estuvo presente y confesó su entusiasmo por compartir la historia con los fans. También asistió el director, Craig Gillespie, y la actriz Kirby Howell-Baptiste, quien interpreta al personaje de Anita.
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