Obtener suficientes horas de sueño durante la noche es lo más importante para nuestra salud. De hecho, hay una explicación del por qué los lunes nos sentimos más cansados y pareciera que hubiéramos andando de «carrete» todo el fin de semana. Y lo cierto es que este tipo de fatiga es muy frecuente en las personas. Por eso nos cuesta más comenzar la semana laboral.
De hecho, una reconocida revista de moda española, realizó un reportaje y explicó que «la principal razón es que el cuerpo funciona a través de ritmos: el corazón late a un ritmo, bombea sangre a un ritmo, respiramos a cierta cadencia, la digestión también tiene su propio tiempo y lo mismo ocurre con el sueño».
Es por eso que cuando no respetamos una rutina de descanso diario, inevitablemente afectará nuestra salud. Por ejemplo, dormir 3 horas una noche, seis al día siguiente y, más de diez el fin de semana, jamás sentirás esa sensación de haber descansado por completo. Esta es la verdad: ¡el sueño no se recupera! De ahí que lo ideal es mantener un equilibrio en las horas que dedicamos a dormir, para así darle estabilidad al cuerpo.
Lo óptimo es dormir entre 7 a 8 horas diarias, es lo que el organismo requiere para liberar las toxinas y regenerarse.
Además, diversas investigaciones del Medical News Today muestran que no descansar lo suficiente aumentaría la presión arterial y, por lo tanto, el riesgo de sufrir enfermedades relacionadas al corazón.
De ahí que comenzar el lunes provoca un estado de estrés o desánimo en muchas personas, y si a eso le sumamos un mal dormir, la sumatoria da como resultado: ¡odio los lunes!
10 claves para dormir bien
- Mantener el mismo horario de sueño. Levántate y acuéstate siempre a la misma hora, incluso en fines de semana.
- Hacer ejercicios de relajación antes de dormir, ayuda a conciliar mejor el sueño.
- Hay que evitar las siestas.
- Ejercitarse a diario.
- El dormitorio debe estar acorde al descanso. Eliminar sonidos o luces que molesten.
- Dormir con una almohada y colchón cómodos.
- Evitar las luces brillantes por la noche y exponerse a la luz solar en la mañana,para favorecer el llamado «reloj interno».
- Evitar el alcohol, el tabaco y las comidas pesadas por la noche.
- Dedicar la última hora antes de dormir a una actividad tranquila, como leer.
- Si no puedes conciliar el sueño, ir a otra habitación y hacer algo relajante hasta sentirse cansado.